sábado, 27 de febrero de 2021

Normas de obligado cumplimiento para la celebración de la Semana Santa 2021 en parroquias y comunidades cristianas

 


Introducción


La Pascua de Resurrección es la fiesta en torno a la cual gira todo el año litúrgico. Hacemos el memorial de la victoria de Jesús sobre su muerte y la nuestra, y tras la inmediata preparación, con los textos y gestos con que el tiempo de Cuaresma nos ha acompañado, entramos en el gozo pascual poniendo un aleluya en nuestros labios.


Esta liturgia madre se concentra en los días del Triduo pascual que nos prepara para llegar a la noche de pascua desde el Domingo de Ramos con la entrada en Jerusalén, pasando por la Misa Crismal, la Misa In Coena Domini del Jueves Santo y el Oficio de la Pasión del Señor del Viernes Santo. Todo un itinerario que nos permite hacer un camino que nos conduce hasta la luz resucitada de la victoria de Cristo.


La Congregación para el Culto Divino y Disciplina de los Sacramentos ha publicado una nota el 17 febrero 2021 con orientaciones concretas para poder vivir esta circunstancia. En base a ella, damos nuevamente estas indicaciones que hemos de observar para evitar el exceso de una actuación que sería inadecuada como si nada estuviera pasando, o el defecto de una inanidad que nos dejaría sin celebrar debidamente el corazón de la liturgia cristiana.


Quiera el Señor y nuestra madre la Santina de Covadonga sostener nuestra esperanza y hacernos vivir este momento con una actitud verdaderamente cristiana. Quizás no está en nuestras manos cambiar las circunstancias, pero sí poder mirarlas y vivirlas de otra manera, la manera cristiana.


 


Orientaciones para el Domingo de Ramos

 


Se omite la bendición de los Ramos. La Misa comenzará con la señal de la cruz y el saludo del ministro.

La lectura de la Pasión la puede hacer un solo lector, en este caso, el sacerdote que preside la Misa.

 


Orientaciones sobre la Misa Crismal

 


La Misa Crismal se celebrará el Martes Santo, como es habitual, en nuestra Catedral Metropolitana a las 11h de la mañana. Como señala la Santa Sede, invitando a una recuperación de esta importante cita, “conviene que participe una representación significativa de pastores, ministros y fieles”. En esta coyuntura se urge a que tal representación se concrete en: Consejo Episcopal, Cabildo Catedral, Arciprestes, Permanente del Consejo Pastoral Diocesano y Seminarios. Los fieles que espontáneamente quieran participar en la Misa Crismal como otros años, podrán hacerlo hasta completar el aforo permitido en la Catedral.

Se insta a que se recojan los óleos bendecidos este año, dado que el año pasado no se celebró la Misa Crismal. Los Arciprestes se encargarán de recoger los óleos para las parroquias de su Arciprestazgo.

 


Orientaciones para el Jueves Santo

 


Se omite el rito del lavatorio de los pies.

Después de la comunión, se reservará el Santísimo en el Monumento que previamente se habrá preparado, omitiendo la procesión, para la adoración personal de los fieles posteriormente. La Misa terminará con la oración para después de la comunión.

Donde se tenga una Hora Santa, habrá que tener en cuenta el horario establecido por las autoridades civiles como “toque de queda”.

 


Orientaciones para el Viernes Santo

 


La celebración de la Pasión del Señor se desarrolla tal y como indica el Misal Romano. No obstante, la adoración de la Santa Cruz con el beso se limitará sólo al celebrante, y los demás harán un gesto de piedad hacia la Cruz desde sus sitios.

En la oración universal se añadirá una plegaria con el número XI con el siguiente texto:

“Oremos también por los enfermos de la Covid-19, por todos los que están a su cuidado, por los profesionales de la sanidad, por los sacerdotes y voluntarios cristianos que trabajan en esta circunstancia por los demás, por los que están buscando una solución desde la ciencia a esta pandemia, por las fuerzas de seguridad, por los que han muerto, por sus familiares y amigos, para que el Señor, dueño de la vida y de la muerte sostenga nuestra esperanza y nos dé abundantemente su gracia˝.


 


            Se ora un momento en silencio. Luego prosigue el sacerdote:


Dios todopoderoso y eterno,


que quisiste que tu Hijo Unigénito


soportara la debilidad de nuestra carne,


el sufrimiento y la muerte de cruz,


concédenos propicio consuelo en la enfermedad,


fuerza a los que están al cuidado de la salud de los enfermos,


apoyo en nuestras debilidades,


consuelo a los que lloran la muerte de sus seres queridos,


y el descanso eterno a los que han sufrido la muerte,


para que tu pueblo pueda alegrarse


por el cese de la pandemia que nos aflige,


y pueda servirte llevando a cabo lo que te agrada.


Por Jesucristo, nuestro Señor.


 


Orientaciones para la Vigilia Pascual

 


La primera parte de la celebración, denominada Lucernario, se realiza en el presbiterio. Tras la monición inicial, que puede omitirse, se suprime la bendición del fuego y se procede a la bendición del cirio pascual, que se enciende y se coloca en su lugar. Omitiendo la procesión y las aclamaciones, se cantará o leerá el pregón pascual.

La Liturgia bautismal se reduce únicamente a la renovación de las promesas del Bautismo. Se omite, pues, la procesión a la pila bautismal y la aspersión. Se finaliza esta parte con la oración de los fieles.

En los lugares donde se celebre el sacramento del Bautismo, se preparará la fuente bautismal con agua sólo para los bautizandos.

Para el horario de la Vigilia Pascual téngase en cuenta la hora marcada por las autoridades civiles como “toque de queda”.

 


Retransmisión de las celebraciones por medios de comunicación social

 


La nota de la Congregación para el Culto Divino y Disciplina de los Sacramentos del 17 febrero 2021 señala que, en esta circunstancia de la pandemia, el uso de las redes sociales para la retransmisión de las celebraciones, “junto a los resultados positivos, también se han observado aspectos problemáticos. Para las celebraciones de la Semana Santa se sugiere facilitar y privilegiar la difusión mediática de las celebraciones presididas por el Obispo, animando a los fieles que no pueden asistir a su propia iglesia, a seguir las celebraciones diocesanas como signo de unidad”. Así pues, pensando en los enfermos o impedidos por algún motivo, se pide que únicamente se retransmitan las celebraciones desde nuestra Catedral presididas por el Arzobispo, invitando a todos los demás fieles a que acudan a sus parroquias o comunidades cristianas.


 


Nuevamente elevo mis oraciones por todos vosotros, sacerdotes, consagrados y laicos, para que cada cual, en su lugar y con su menester en la vida, trate de vivir esta circunstancia de la mejor manera cristiana. Junto a la bendición del Señor, invoco la intercesión de nuestra Santina de Covadonga, Madre de nuestra esperanza.


 


Dado en Oviedo, a veintiséis de febrero de dos mil veintiuno.


 


+ Fr. Jesús Sanz Montes, ofm

Arzobispo de Oviedo


Enviado por:

Jesús Manuel Cedeira Costales.


Fuente:

www.iglesiadeasturias.org

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Nota: solo los miembros de este blog pueden publicar comentarios.